Monday, August 07, 2006

Bienvenidos!!!


Finalmente, después de un par de meses, fui juiciosa y subí algunos cuentecillos que tenía por ahi. Me complace mucho darles la bienvenida a este blog que con ayuda de mi experta amiga Gloqui he creado para mostrarles lo que hago cuando definitivamente no me puedo concentrar en algo más.
Salvo muy pocas personas nadie los ha leido, asi que espero su muy crítico juicio sobre ellos. Es un poco atemorizante pero mas miedo me daria morirme y que los lean cuando yo ya no esté. Si me van a dar duro, que sea en persona.
Por favor sean amables pero sinceros. Este es un voto de confianza que estoy dando a ustedes.
Gracias!!!

PD. Aún tengo dudas sobre la plantilla, tambien agradezco sus opiniones al respecto.

1 2 3 Cuentas

06 - MAY - 12
1 2 3


Un, dos, tres. Cuento que no cuento. Cuento el tiempo que transcurre desde que despierto hasta que me duermo. No cuento lo que pienso. A veces cuento lo que me pasa, y la cuenta se me descuadra . También hago cuenta de mis cuentos y me parecen muchos los que escondo y mas bien pocos los que muestro.

Tampoco cuento con quien cuento porque no me gusta dividir y saber que algún día tendré que restar cuando no estén junto a mi. Multiplico lo que me gusta y sumo lo nuevo para aumentar la cuenta. Cuento la música, que es cuenta de alguien mas pero que de repente también es parte de mi suma, como sumo también todo lo que me dices, lo que viven los demás. Y sumo y divido y multiplico. Y cuento. Un, dos, tres.

Mesmerize. Remedio contra el olvido

Originalmente este era un cuento para un concurso. No lo envie porque (para variar) llegó la fecha limite y no iba ni por la mitad y porque al final no tenia nada que ver con el tema... creo.
Pedro y Maria son nombres casi que "genericos" como la cocacola y los kleenex, asi que no es nada personal, aclaro.



05 - OCT - 28
MESMERIZE. REMEDIO CONTRA EL OLVIDO


Pedro = Solo. María = Sola.
Pedro y María = Dos inmensas soledades en un mundo donde todos los mundos están solos.
Si (Pedro y María) caminan por el mismo lugar = Pedro y María se conocen.
Pedro y María = Una gran amistad.
Pedro y María = Un pequeño amor.
Pedro y María = Una inmensa pasión en la enorme soledad.
Pedro y María = Las verdades completas, los sueños eternos.
Pedro y María = Los sitios llenos de recuerdos, las calles de colores, las tardes de conversaciones, de discursos, de palabras. Las noches de recuerdos, de sensaciones, de olores.
Pedro y María = La cotidianidad. Los días iguales en el calendario. Las mismas caras, los mismos cuerpos. Las mismas quejas.
Pedro y María = Las memorias de tiempos mejores aún no sepultados por la rutina. Los corazones llenos de recuerdos que ahora les pesan. Las memorias de la otra piel cuando era nueva, cuando el miedo les hacia reír.
Pedro y María = Todos los días iguales. El tiempo les pesa.
Pedro y María = El final.
Pedro – Maria / Maria – Pedro = El silencio. Las respuestas que nunca tuvieron.
Pedro – Maria / Maria – Pedro = El vacío. La ausencia del otro. La nostalgia del otro.
Pedro – Maria / Maria – Pedro = Repetir el mantra = (Tu nombre + Tus ojos + tu voz) = Para no olvidarle, para no perderle.
Pedro / Maria = Recorren los pasos caminados, los lugares visitados, las comidas compartidas, la música oída para no dejar de sentirse uno al otro. Para que (Tu nombre + Tus ojos + tu voz) no se olviden. Para no ignorar que solo Pedro = Vacío y que solo Maria = Soledad.

Cuentos de la Princesa... este titulo casi no se nombra...

Los siguientes son una serie de cuentecillos del pasado. Los puse todos en un solo post ya que son más de dos... y seria muy complejo y dispendioso hacer un post por cada uno. Mi más sinceras disculpas por mi poca paciencia para este trabajo.
Sobra decir que son libres de criticar. Esa es precisamente la idea.





08 – MAR - 04
CUENTOS DE LA PRINCESITA


Para que nadie viera que su corazón estaba roto. Lo cubrió todo con su hermosa sonrisa de Princesa feliz.

Disfrazó las lagrimas tristes de dolor por su corazón herido con florecitas pálidas y ocultó la falta de color en las frases con palabras graciosas que respondía en sus conversaciones.

Era muy difícil, pero lo hacia tan bien que nadie lo notó. Hablaba en broma sobre sus tristezas y divertía tanto a quienes la oían, que ellos no imaginaban lo que ocurría en realidad, y lo hacia con tanta despreocupación que nadie pensaba que fuera tan importante ni tan urgente. Por qué preocuparse por alguien tan feliz?

Pero se quebraba por dentro. Hubo un tiempo en que dejó de sentir la sombra de la melancolía y pensó que finalmente iba a estar tranquila, pero solamente fue un receso porque de nuevo la atacó de manera imprevista y silenciosa.

Un día cualquiera se dio cuenta de que ya no era la misma, de cuanto había cambiado, de todo lo que había abandonado o dejado escapar y de que era inútil seguir pensando que aún era una niña. Se dio cuenta de la perdida de su infancia.




30 – MAR - 04
CUENTOS DE LA PRINCESITA


- Niña hermosa, ni todo el magnifico cielo sobre tu cabeza podría opacar tu belleza.

La Princesita sabia que el Caballero mentía, igual que cuando le decía que la recordaba toda. Mentía igual que cuando le sonreía, mentía igual que cuando le decía que las murallas de su castillo solo lograrían demorarlo, mas no detenerlo... Cual castillo, si ella no poseía nada.

- Adorada Ama, estoy bajo tus ordenes. Haremos lo que tú desees.

Y la Princesita hacia enormes esfuerzos por contener el mar de sus ojos, por no permitir que todo ese dolor se desbordara de sus mejillas.

- Princesita hermosa, ni siquiera el tiempo podría arrancarme tus recuerdos...

Una dulce sonrisa esbozó en los labios de la Princesita y una mirada tierna apuntó a aquellos ojos que mentían:

- Honorable Caballero: parte a tu guerra que te espero. Y cuando vuelvas de tus batallas me contarás tus aventuras. Confía en que yo estaré aquí para cuando vuelvas.

Ella sabia que El no iba a volver.




18 - JUN - 04
CUENTOS DE LA PRINCESITA

El Caballero nunca sabría que la Princesita lo añoraba. Cada noche, aunque sabia que El no iba a volver, esperaba verlo regresar de la guerra. Esperaba que estuviera de nuevo con ella para que cumpliera todas las promesas que le había hecho. Ella esperaba que El regresara para rescatarla de su infinita tristeza. Y aunque podía enviar a sus mensajeros a recorrer su reino para que le informaran de su paradero, nunca lo haría. Ni un esfuerzo más por El. Ya no tenia sentido perseguir las cosas que nunca serian para ella. No tenia sentido cerrar los ojos y seguir estrellándose contra la pared.


00 - SEP - 04
CUENTOS DE LA PRINCESITA


Entonces la Princesita decidió salir y conocer nuevos reinos porque no sabia como eran.

En uno de los reinos que visitó, vio como todos los habitantes vestían diferentes los unos de los otros. Y esto le pareció curioso.

En otro, todos caminaban muy rápido y muy serios, con prisa por llegar a algún lugar. La Princesita se preguntó si esto los hacia felices, pues parecían muy preocupados y cansados y su mirada era apagada y huidiza. La Princesita se fue muy pronto. Estaba aburrida de que todos estuvieran tan ocupados y de que nunca tuvieran tiempo para explicarle porque tenían tanto que hacer.

Visitó muchos lugares muy distantes y muy diferentes, con personas muy alegres pero vacías. La gente vacía que se alegraba con elixires mágicos para luego volver a llorar... esto horrorizó a la Princesita. Lugares con personas egoístas que no pensaban en los demás, con gente que quería ser alguien mas. Las personas amables que luego le robaban algo, con personas resignadas a que esto sucediera.

A pesar de que todos los reinos eran distintos, pronto volvió a la Princesita el vació que siempre la había acompañado. Por que no encontraba lo que estaba buscando? Por que no sabia que estaba buscando?.

Ella podía tomar cualquier rumbo, porque en su reino o eu uno totalmente opuesto no lograba encontrar su norte.



04 - OCT - 04
CUENTOS DE LA PRINCESITA


Nadie lograba despertar de su profundo sueño a la Princesita feliz. Una mañana cuando no salió de su habitación para tomar hidromiel (un intento fallido por hacer mas dulce su vida) alguien se preocupó. La encontraron durmiendo, pálida y laxa, con el puño izquierdo cerrado como sujetando algo. Pálida y laxa, con la expresión confusa. El cabello regado entre las almohadas empezó a crecer demasiado rápido y hubo que cortarlo para que la Princesita no se ahorcara.

Convocaron a todos los médicos, adivinos y hechiceros del reino y otros cercanos, pero la guerra afuera continuaba y muchos no quisieron o no lograron llegar.

Ni todos los remedios, ni los artilugios o hechizos posibles la hicieron despertar. Que soñaba? Donde estaba? Así tan pálida y laxa, no lograban hacerla abrir el puño. Que sostenía con tanto empeño? Que era eso que no quería dejar ir? Por que no despertaba? Había algo que ella no quería abandonar. Donde fuera que estuviera, ella no quería volver.



19 – NOV - 04
CUENTOS DE LA PRINCESITA

La Princesita feliz tuvo un sueño. Soñó con el Caballero, pero ni ella era Princesa ni El era Caballero.

El era un río corriendo siempre hacia delante y Ella era la flor en la orilla, viéndolo pasar si poderlo detener.

El era el viento a su alrededor. Ela era la red que no podía abrazarlo.

Y estas eran todas las frustraciones que la Princesita tenia que enfrentar: añorar lo que no podía tener. Y deseaba escapar pero no intentaba soltar los nudos que la ataban.

***

Amas la franqueza pero no puedes odiar las mentiras cuando son tan bellas y las pronuncian los labios que tanto deseas besar.



27 – AGO - 05
CUENTOS DE LA PRINCESITA

LA ANGUSTIA Y LA FE. LA FE Y LA ANGUSTIA.

La Princesita tenia angustia por perder la fe, aunque creía que el Caballero iba a volver. Sin embargo, tenia dudas. Muchas dudas que le atacaban por la espalda, que se dejaban ver a medias sin mostrarse tal como eran, arañándole la esperanza, dejando incertidumbre, escondiéndose para que ella volviera al sitio donde no quería estar.

Miedos e inseguridades que la atacaban cuando más confiada estaba. Como si la vida en su sarcasmo la dejara ver el cielo claro para que se aventurara a salir a contemplarlo y tan pronto cruzara el umbral de la puerta una tormenta estallara. Y ella no aprendía. Siempre se decía “no volveré a caer”, “no lo volveré a hacer”, pero lo olvidaba. Y su infinito corazón, tan lleno de pedacitos quebrados, ya no sabia cuantos remiendos mas podría soportar.



03 – FEB - 06
CUENTOS DE LA PRINCESITA


No era justo con la Princesita contar solamente las cosas tristes que le ocurrían. A veces también sonreía... una sonrisa serena, breve.

Sonreía en las mañanas cuando veía el sol y le calentaba la espalda. Sonreía cuando oía reír a los niños puros y tranquilos, descubriéndolo todo por primera vez. Sonreía con las ocurrencias de sus sirvientes: simples o sagaces, pero espontáneas. Sonreía al recordar los abrazos de los reyes, sus padres, ahora lejos en la guerra. Sonreía al recordar al Caballero y la sonrisa breve se esfumaba otra vez.